Al leer o escuchar el término “diseño” nos vienen a la mente distintos sectores como el diseño de moda, el diseño gráfico o el diseño de páginas web. Pero hoy nos queremos centrar en el diseño de arquitectura o diseño arquitectónico. La arquitectura es una de las bellas artes que ha tenido una mayor influencia en todas las civilizaciones y culturas a lo largo de la historia.
A grandes rasgos, en el arte de la arquitectura, el diseño es la parte en la que se da forma geométrica a una idea. Desde el boceto inicial hasta la definición gráfica del detalle, todo es parte del diseño. En este artículo abordaremos toda esa fase, un espacio amplio donde entran en juego diferentes factores, habilidades y perspectivas.
Diseño de arquitectura; pasado y presente
Desde tiempos primitivos, el ser humano se ha dedicado a construir refugios para su abrigo y protección, perfeccionándose a lo largo de la historia a través de diferentes técnicas.
Dependiendo de los recursos naturales de la zona y de los avances de la época, estas construcciones fueron más o menos sofisticadas. Igualmente, demandas de otro tipo como las militares, religiosas o infraestructuras condujeron al desarrollo de diseños arquitectónicos cada vez más exigentes y complejos.
Los diseños arquitectónicos han ido evolucionando a lo largo de la historia, cubriendo las necesidades de cada época o momento y adoptando diferentes estilos y corrientes artísticas.
Antiguamente, en la mayoría de los casos, el objetivo era puramente funcional y práctico. Hoy en día, el diseño de arquitectura no se limita solo al sentido técnico o tecnológico de una construcción, sino también al estético y armónico, llevando la obra a un nivel superior sin perder de vista en ningún momento todos los requisitos y las finalidades de la misma. Es decir, su objetivo primordial es crear espacios agradables y armónicos a la vez que funcionales y seguros.
“Suele afirmarse que la historia de la arquitectura da ejemplos y referencias de cómo los arquitectos del pasado resolvieron problemas similares a los que podamos enfrentar hoy. El problema está en que las situaciones del ayer probablemente poco o nada tienen que ver con las de hoy y la utilidad de un ejemplo del pasado disminuye a medida que nos alejamos en el tiempo. Brunelleschi tuvo la audacia de construir la cúpula de Santa Mría de las Flores sin dar mayor explicación de cómo lo logró. Pero hoy ya no actuamos como Brunelleschi: sometemos nuestros proyectos al juicio de los ingenieros y de los funcionarios públicos que los aprueban. Tampoco recurrimos a la geometría descriptiva para representar nuestras ideas, sino a los paquetes graficadores. Y todo esto es una conquista definitiva, aunque relativamente reciente en la historia de la arquitectura.”
Cosas de Arquitectos
Definición y análisis del diseño de arquitectura
Podemos entender el diseño de arquitectura como la tarea de crear espacios habitables y funcionales para los seres humanos. Es uno de los requisitos en constante evolución para cubrir y satisfacer una demanda que no deja crecer.
Porque si algo es seguro es que cada vez somos más exigentes con la calidad del espacio en el que habitamos.
El diseño arquitectónico es un proceso creativo que se pone en marcha con un objetivo preestablecido. Para llegar a dicha finalidad es necesario tener en cuenta diferentes aspectos relacionados con la arquitectura.
Factores claves en el diseño arquitectónico
El fin del diseño de arquitectura no es otro que crear una obra que satisfaga una necesidad concreta. El espacio a crear puede estar destinado a ser una vivienda unifamiliar, un lugar de trabajo u ocio, como también podría ser una oficina, un auditorio o, incluso, un parque. Para llevar a cabo el proceso de diseño de cualquier demanda, se deben considerar algunos factores importantes como:
- Espacio y geometría
- Elementos constructivos
- Estética
- Ergonomía
- Higiene
- Normativa y reglamentación
Como comentábamos anteriormente, el trabajo de diseño arquitectónico aboga por crear ambientes agradables y en sintonía con el entorno. Un diseño cuidado y completo de un espacio influye en gran manera en el bienestar y el estado de ánimo de las personas.
La psicología y su impacto en el diseño de arquitectura
Además de poner el foco en la estética y la viabilidad técnica de un proyecto, los arquitectos deben velar por una serie de consideraciones menos tangibles como:
- La seguridad: el diseño entra en juego a la hora de garantizar, en la medida de lo posible, un espacio seguro. Esto significa pensar en los riesgos de quien los transita. Evitar errores como escalones poco visibles o techos desiguales en zonas de paso, son tareas donde interviene el diseño de arquitectura.
- La conexión social: la arquitectura forma parte de nuestra vida social y por ello participa de manera activa en las relaciones y la interacción. El diseño creado debe plantear y tener en cuenta las necesidades del grupo en función del uso del espacio. Áreas comunes, zonas comerciales y oficinas son buenos ejemplos de ello.
- La facilidad de movimiento: poder desplazarse de manera cómoda y fluida es una de las funciones principales de cualquier estructura que se diseñe. Los espacios están para vivirlos y para moverse en ellos. Crear dinámicas que fomenten la movilidad en función de las necesidades y del medio de transporte de manera sencilla y clara es fundamental. Evidentemente, no serán lo mismo los requisitos de un aparcamiento que los de una casa, ambos necesitarán un estudio de movilidad diferente y adaptado a la situación.
- La estimulación sensorial: los componentes y los elementos de un espacio generan sensaciones en quienes lo utilizan, por eso es importante jugar con la simetría, las proporciones, la luz y las texturas para evocar equilibrio y armonía en los usuarios y así mejorar el bienestar y la calidad del ambiente.
- Los colores y su impacto psicológico: los colores no se quedan atrás, no solo son una experiencia sensorial, sino también psicológica, ya que afectan a nuestras emociones y nuestro humor. Por poner un ejemplo, los tonos morados están asociados a la estimulación de la creatividad, mientras que el rojo es un color que transmite energía y pasión. La teoría del color es una rama de estudio amplia y llena de sorpresas.
- La ventilación y la luz: una iluminación cuidada y una buena ventilación del lugar tendrán un impacto positivo en el clima laboral de una oficina, o en lo acogedora que sea una casa. Un espacio agradable genera bienestar e influye significativamente en la salud de las personas y, en el caso de las empresas, en la productividad de la plantilla.
El diseño dentro de un proyecto arquitectónico es un proceso formado por una serie de fases bien diferenciadas que son necesarias para garantizar un resultado de éxito.
¿Cuáles son los pasos de un proyecto arquitectónico?
Un proyecto de arquitectura en su etapa de diseño comprende los siguientes pasos:
Prediseño
En esta fase se define el alcance del proyecto, aclarando lo que debe incluir el diseño y lo que no. A su vez, se estudian y acuerdan puntos importantes como los requerimientos técnicos, la situación y emplazamiento, los usos y actividades a desarrollar y la ocupación que va a tener la edificación, entre otros.
Diseño conceptual
Una vez definidas todas las especificaciones de diseño, se elaboran una serie de bocetos que ilustran el proyecto. A través de ellos, se analizan las diferentes alternativas estudiando si se ajustan a las necesidades en tiempo y forma y, por supuesto, al presupuesto. En esta fase se toma la decisión del camino a seguir.
Desarrollo de diseño
Una vez consensuado y aprobado el diseño conceptual se procede al desarrollo y definición precisa del mismo. En esta etapa se analizan también todas las partes de la futura construcción y se estudia la viabilidad de su ejecución. Es el momento de definir todos los componentes del proyecto para evaluar la adaptación del diseño arquitectónico a las exigencias estructurales o de instalaciones. Ya en esta fase se elaboran los planos que definen con exactitud el diseño.
Planos de ejecución
Una vez definidos y revisados todos los elementos del proyecto, se realizan los planos de construcción, donde se detalla en profundidad cada una de las partes del diseño.
Estos planos son la guía práctica para que después una empresa constructora pueda ejecutar la obra. Muestran el ensamble de todos los elementos que conforman la construcción. Incluso son la guía para que se fabriquen a medida ciertos componentes de la estructura.
En esta etapa es clave el trabajo colaborativo de los diferentes agentes implicados en el proyecto. Se deben confeccionar planos de otro tipo de componentes como del sistema estructural o de las instalaciones de fontanería y saneamiento, eléctricas, climatización, etc con base a los planos arquitectónicos previamente realizados.
Realizar un proyecto arquitectónico puede parecer a simple vista una tarea sencilla, pero es todo lo contrario. Requiere un amplio conocimiento de varias disciplinas, experiencia en construcción y el apoyo de un equipo multidisciplinar.
Con todo esto, lo primordial es desarrollar el proyecto con una amplia perspectiva y siguiendo una metodología que evite errores de diseño que se traduzcan en sobrecostes de obra e imprevistos que afecten tanto al equipo de trabajo, como al cliente. Por eso, el arquitecto, más allá de la formación específica, debe tener un perfil polivalente, creativo y con capacidad de análisis y de visión de conjunto.
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Hola!! Podría un diseñador gráfico con conocimientos en 3d dedicarse al diseño arquitectónico? Saludos!!!
Por supuesto, si a uno le agrada el ambito de la arquitectura tiene un impacto positivo porque uno ya tiene y domina los conocimientos de dibujo en 3 dimensiones.